Noche banal prometía ser la del jueves pasado. Sentada en una terraza del centro rodeada de beautiful people que habían sacado del armario sus mejores trapitos y las joyas a tó lo que da y se habían pintado el ojo mucho más de lo normal, para pasear palmito y ego subido por tiendas y glam parties; había sarao gordo en el centro de la ciudad. Era la Summer Shopening Night y se respiraba ambientazo pre-estival y de luxe colorín y champagne con fresas, que queda muy chic. Como diría adorada Olvi: «es el glitter de la Super Star».
En estos tiempos de crisis en que no llegamos a fin se mes y la mayoría nos acabamos de enterar de lo que es la prima de riesgo, cualquier evento que pinte de luces y de color este ambiente grisáceo se me antoja ya no sólo estupendo sino casi saludable y necesario.
Es como este fin de semana, eminentemente deportivo donde por fin todos los españolitos, nos ponemos las pinturas de guerra y sentimos, histéricos, exultantes y excesivos, que en el deporte nadie nos tiene que rescatar. Que de la mano de un asturiano veloz, un manacorí con turbobrazo o de un once de furia roja, nos unimos, por fin, en el sentimiento de que ser español es un honor, un privilegio y un lujo. Incluso ahora. Más que nunca. Y durante lo que dura una carrera o un partido… O una tarde de compras y vanidades… No existe ni crisis, ni bancos y la única prima de la que soy capaz de acordarme es la de Burgos.
Eso y los anuncios cerveceros del verano… Definitivamente unen y hacen que te brote una sonrisa y una luz esperanzadora aquí mismo. Mmm.
Seré banal, pero el despropósito del brilli brilli del oropel a ritmo de «Material Girl» y «Dancing Queen», el orgullo patrio, este sentimiento que de alguna manera invisible y momentánea nos une… Todo eso y lo que haga que se nos quite la cara de acelga… Eso sí me parece un verdadero rescate.
Rescátameee!!!
Esta chica no solo me quita la cara de acelga sino que siempre me pone la más bonita de las sonrisas. Mi" Glitter" contigo es eres un crack !!