Será como las frases de los hombres que a menudo dicen algo y ahí me ves analizando la frase pensando qué demonios habrá significado aquello en realidad? Es que nunca me tragué eso de que fueran simples, ya sabes…
Pues lo que me da por pensar es la cantidad de «hazañas-tonterías-barbaridades-bobadas» que somos capaces de hacer por Amor y que ni de lejos haríamos de no encontrarnos sumidos en ese fascinante estado catártico en el que el desboque del corazón zapatea al ritmo del golpe de estado del hipotálamo, la revolución de la feniletilamina y norepirefrina. Que vivan las hormonas desbocadas!!!
Personalmente se me ocurre que he hecho más de tres (y de nueve) y con diferente destinatario además. Con kilómetros de por medio y muchas vueltas a la manzana para hacerme la encontradiza después en una vespa que no era mía… y aún hoy me aflora una sonrisa cuando la imagen llega a mi memoria. Y me entra calor por la nuca. Mmm… Algunas fueron pa na, pero otras… otras me supieron a burbujas! Las repetiría. Claaaro! Y las haría nuevas! Tú no?
No es maravilloso sentirse así de idiotizado hasta ser capaz de dejarte encadenar para mayor placer mutuo? Es que hay mejor esclavitud que la que provee el tirano de aquí abajo? No se me ocurre. Que necesito otra vida para repetir las tonterías y las locuras de Amor de ésta.
Yo me dejo. Me dejo! Que vivan las hormonas desbocadas y el Sr. Grey con rayadas y todo. Sobre todo con rayadas.
Ay como te entiendo…tu locuras??? de sobra sabes que mi cabeza la perdí y ya no la encontré nuncaxsiemprejamás,así k t entiendo taaaaaaaaaaanto….
Decirte que me siento totalmente "corporativa";
X cierto un apunte…. tengo el libro que me dejaste entre las manos y me digo a mi misma que el autor se podría plantear cambiar la "sinopsis-portada" por tu bien detallada impresión del libro…"despojada de lubricidad semántica, de orgasmos negro sobre blanco, de sexo duro de papel, de bondage…joder Bel, esto no se haceeeeeeee
Tu vecina de la cabeza perdida
La noche había sido como esperaban, las copas , la música pegadiza y la compañía constituían un cocktail difícil de ignorar, se habían reído como hacia tiempo que no lo hacían, se habían desinhibido y se sentían pletóricos, lanzados, pero uno de ellos decidió poner un poco de orden y propuso ir a casa a descansar. Era viernes y aun quedaba el sábado por delante.
Se dirigieron los tres al coche, y la noche invitaba a no aligerar el paso, así que ella acortó su paso flanqueada por sus dos amigos, que asiéndola por la cintura le rezaban una interminable letanía de halagos. Se sentía la mujer más feliz del mundo con aquellos dos amigos del alma.
Cuando llegaron al parking, uno de ellos propuso tomar la última en casa, y a todos les pareció muy buena idea. Se montaron en el coche y se dirigieron a casa.
Cuando llegaron, uno de ellos propuso que se sentasen en el salón mientras el preparaba las bebidas y así lo hicieron.
Cuando se quedaron solos, estaban bromeando sobre los DVD que habían sobre la chimenea, y ella se recostó riendo sobre su hombro en el momento en que el giraba su cabeza, y sin darse cuenta, sus labios se encontraron.
Ninguno de los dos se dio cuenta del tiempo que transcurrió hasta que volvió el tercero en discordia con las bebidas, que dejando las copas sobre la mesa susurró un “yo también quiero” con una mezcla de tonos entre la ironía y la envidia y ella no se lo pensó dos veces, lo cogió del cuello, y con un “ven aquí” fundió su boca con el recién llegado.
Rápidamente, como instintivo, uno de ellos manipulo el potenciómetro de la lámpara que les alumbraba y redujo la luz al mínimo imprescindible, mientras tanto las manos de ella acariciaban el cabello de uno mientras entablaba una lucha de lenguas con el otro. En segundos, la blusa de ella reposaba sobre uno de los cojines junto a las camisas de ellos y su sujetador colgaba de sus hombros, abierto, que había sido sustituido por el calor de dos bocas húmedas y calidas que acariciaban una dureza casi dolorosa de sus aureolas. El calor húmedo de aquellas lenguas en sus senos, y unas manos hábiles que se habían deslizado por debajo de su falda hicieron que sus piernas se separasen lo suficiente para notar que su ropa interior ya no cubría la humedad de su vientre, unos dedos suaves, delicados, se movían rítmicos acompasando cada uno de sus gemidos.
Una de las cabezas libero uno de sus senos y busco refugio entre sus piernas e instantáneamente noto como un calor indescriptible pugnaba por introducirse en ella. Mientras sus manos habían buscado el cinturón de quien estaba ocupándose de su boca y sus senos, y cuando logro liberar lo que deseaba, y mientras notaba como subía su excitación, lo envolvió con su boca. Notar como palpitaba la sangre en aquel miembro mientras aquella lengua le hacia sentir aquella intensidad de sensaciones, le hizo separar sus piernas como no había imaginado que pudiesen separarse. Quiso hacerlo parar, quería disfrutarlo, quería alargarlo al máximo y separando aquella boca del resorte de sus placeres, noto una intensa necesidad de sentirse llena.
Mientras ella seguía notando como sus labios resbalaban y cubrían aquella erección, noto como los labios que cubrían la entrada al interior de su vientre se abrían empujados con una lentitud desesperante por su otro compañero, tan lento, suave y dulce como desesperante, con una de sus manos cogió la cintura y la empujo contra si, no podía aguantar mas, no quería aguantar mas. Notarse penetrada mientras su boca se ocupaba de su otro amigo y notar sus senos empapados mientras pellizcaba sus aureolas, fue más de lo que podía resistir… se tensó y estalló en un grito, su respiración se agitó, su corazón apresuró su latido hasta casi estallarle en el pecho y un inmenso placer la envolvió,… y tras este estallido se sucedieron máss y más, no podía creer que su cuerpo fuese capaz de asumir tanto placer, tanto deseo, en eso, su vientre y su boca se llenaron de la húmeda calidez casi al unísono.
Vecinita muy querida, interesante propuesta. Voy a enviarla a la editorial a ver si cuela.
Ps. No me vayas a mojar el libro. De ser asín, ni me lo devuelvas… 😉
Halaaa! Al lodazal!!! Me recuerda mucho a "Tres formas de Amar", peli noventera de Stephen Baldwin. Fascinantes los sentidos…
Bendita locura…increible como siempre,guapa
arrepentirte de haberte hecho la encontradiza,
que cosas tienes 🙂
lo que pasa es que las posibles relaciones no siempre acaban como a nosotras nos gustaria
pero el morbo de la situacion, el sentir esos calores, palpitaciones y demás BIEN VALEN INTENTARLO aunque sigan pasando los años,y el tener a ese hombre que tan caliente te pone tan cerca…….uhmmm que me estoy poniendo a cien recordando, jejejej
no crees??
yo lo tengo claro
saluditos
ana luna
Me he sentido totalmente identificada con tu relato,
ademas el libro de Christian Grey es lo más, jeje, se nota que tiene gancho y triunfa en el publico femenino
¿quien no ha vivido alguna vez y se ha comportado como tu cuentas en tu entrada?
aquella que no ha sentido nunca la atracción fatal, el morbo y la pasión por sus venas y sentir eso alguna vez en la vida no tiene precio, aunque luego no salgamos victoriosas 🙂
Cris
Con los años que tengo y las cosas que he visto aún no me he arrepentido de ninguna de las vivencias q tuve. Buen balance, creo yo. Indicativo de que tan mal no lo hice? Yo creo que sí, verdad?
If it makes you happy, it can´t be that bad…