El final del verano llegó y tú partirás…
Cada verano sin poder evitarlo oigo al Duo Dinámico en mi cabeza. Puñetero Verano Azul, puñetero Chanquete…
El caso es que hace un ratito esta tarde y regresando a casa con el cielo tintado de una amplia paleta de tonos rosa, el sol huyendo, la noche ya cayendo fresca, las ventanas medio subidas y los faros del coche encendidos (ay!) me ha entrado penilla.
Ya puede ser el peor verano de mi vida, que siempre les encuentro momentos maravillosos, cenas al aire libre, tiempo para respirar, para sentir el sol en la cara e incluso uno o dos dias para empaparme de salitre, iodo, gotas de vitamina no sé cuantitos, recarga de alcalina para el laaaaaaaargo invierno que si, que ya lo sé, que ya me he percatado de ya llega, güendiez, que no me lo vuelvas a repetir. Me falta concienciarme y hacerme a la idea. He dicho ay?
Pues me da igual. Ya pasó, ya pasó. El verano que viene será mejor. Sin la más mínima sombra de duda! Y éste… pues oye, un par de cosas se me ocurren que me ha dejado muy positivas y prometedoras. Saber que puedo mucho más de lo que pensaba, redescubrirme, echarme un pulso (y ganarlo) y alguna otra sorpresa inesperada que ni siquiera me veía venir. Quién sabe? Quizá el invierno venga chulo!
Uhm! Que venga! Pues a por él. When september ends…